Hola!
Pues hoy toca experimento otra vez….Hace tiempo que estoy queriendo
hacer una crema de verduras diferente, y creo que con esta, lo he conseguido,
es casi como tomar la típica ensalada de acompañamiento de pimientos rojos con
bonito o atún pero calentita, que en el invierno se agradece.
Probarla, si os gusta la
ensalada de verano os sorprenderá!
Tiempo de preparación: 45
minutos.
Grado de dificultad: Media.
Ingredientes: para 2
raciones.
3 pimientos rojos
grandes.
2 patatas medianas.
1 lata de bonito en
aceite.
1 latita de huevas (sucedáneo
de caviar o si puedes caviar jajaja yo no)
½ vaso de vino blanco.
4/5 cucharadas de aceite
de oliva.
Sal.
Azúcar.
Paso 1.- Lavamos los pimientos enteres y los ponemos en una bandeja de
horno con el aceite el vino y la sal. Los metemos en el horno tapados con papel
de plata y lo ponemos con calor por arriba y abajo a unos 200ª y lo dejamos
hasta que los pimientos estén. Esto ya sabéis que depende del pimiento y del
horno, a mí me han tardado 30 minutos.
Paso 2.- Cuando los pimientos estén
los peláis, si queréis dejarlos para el día siguiente y así se pelan mejor y
claro no os quemáis….
Una vez pelados quitamos muy bien los pipos y las partes blancas de los
pimientos que amargan, y separamos en un cazo el líquido y en el ponemos las
patatas peladas y cortadas en láminas y las dejamos cocer hasta que las patatas
estén blandas.
Paso 3.- Cuando las patatas estén
blandas pasamos la batidora y añadimos sal si es necesario. En otro cacharro
empezamos a batir los pimientos asados y añadimos poco a poco el caldo con las
patatas batidas hasta que tenga la textura que queráis, más o menos cremoso.
Paso 4.- Cuando ya tenga la textura que queráis llega el momento de
equilibrar, cuando lo probéis por primera vez os parecerá un poco amargo en el
fondo, y es el momento del azúcar, poco a poco le añadís sal y azúcar hasta
equilibrar. No os preocupéis si os queda más bien dulce, ya que la sal se la
añaden el bonito y el sucedáneo..
Y ya sabéis……..La comida lo primero!